Estomatitis: ¿qué es y cuál es su tratamiento?
La estomatitis es una enfermedad que aparece en diversas zonas de la cavidad oral, como labios, lengua, encías o mejillas.
La boca es una zona muy sensible de nuestro cuerpo, pues tiene un papel esencial en nuestro día a día. Es por ello que las lesiones orales resultan especialmente incómodas. Y es que el dolor o malestar ocasionados por una herida afectan a acciones cotidianas como hablar, comer o tragar. Una de las enfermedades que más inconvenientes generan en la boca es la estomatitis, que conlleva lesiones similares a las llagas.
¿Qué es la estomatitis?
La estomatitis -o gingivoestomatitis- es el nombre con el que se conoce a la inflamación de la mucosa bucal. Puede presentarse en diversas zonas de la cavidad oral: labios, paladar, lengua, encías o mejillas. Se caracteriza por la aparición de heridas, que varían en tamaño y apariencia, y por la hinchazón de los tejidos afectados.
Tipos de estomatitis
Realmente, la estomatitis engloba diferentes afecciones que implican esta inflamación de la boca, por lo que distinguimos entre varios tipos:
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Estomatitis aftosa: es una de las más frecuentes e implica la presencia de numerosas úlceras -o aftas- en la mucosa. Las llagas suelen tener un color blanco o amarillo, con un cerco rojo alrededor.
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Estomatitis herpética: también conlleva la aparición de aftas, aunque en este caso tienen pus en su interior y suelen formarse en el labio.
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Queilitis o estomatitis angular: son heridas que aparecen en la comisura de los labios. A estas lesiones también se le conocen comúnmente con el nombre de boqueras.
¿Cuáles son los síntomas de la estomatitis?
La consecuencia de la estomatitis es la inflamación del tejido, aunque hay otros síntomas que nos pueden alertar de que la tenemos.
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Lesiones que varían en apariencia: llagas o aftas, úlceras…
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Enrojecimiento de la zona afectada
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Dolor y molestias al hablar, comer o tragar
La estomatitis supone la inflamación y aparición de llagas en los tejidos mucosos de la boca, sobre todo en la lengua, mejillas y los labios
¿A quién afecta la estomatitis?
Este trastorno oral puede afectar a personas de cualquier edad, no solo a adultos, sino también a niños y a bebés. De hecho, la estomatitis en niños es relativamente habitual cuando el paciente ha tenido previamente el virus del herpes labial. En estos casos, además de la sintomatología ya mencionada, es posible experimentar otros inconvenientes, como fiebre, mal aliento y malestar general.
¿Cuáles son las causas de la estomatitis?
Al presentarse en forma de inflamación y lesiones en la mucosa, la gingivoestomatitis puede estar causada por múltiples causas. Aun así, podemos decir que las más habituales son las siguientes:
Déficit nutricional
La falta de vitaminas y nutrientes tienen un impacto directo en el adecuado funcionamiento de todo el organismo, incluyendo a la boca. De ahí la importancia de llevar una dieta sana y equilibrada, ya que contribuirá en gran medida a conversar nuestra salud bucodental. En este sentido, si estamos ante deficiencias nutricionales es posible que las razones sean:
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Malnutrición: está provocada por una dieta insuficiente.
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Malabsorción: se produce cuando nos alimentamos correctamente, pero el cuerpo no absorbe los nutrientes de forma correcta.
En estos casos, lo más frecuente es que la estomatitis aparezca por déficit de hierro y vitaminas (B2, B3, B6, B9 y B12).
Aparición de aftas
La estomatitis aftosa consiste en la aparición de llagas en la boca que se repiten de manera recurrente. Es decir, estas heridas llegan a curarse, pero tienden a reaparecer con el paso del tiempo. El origen de la estomatitis aftosa no es completamente conocido y no hay cura para ella.
Por ello, el tratamiento es sintomático y está encaminado a aliviar los efectos negativos que provoca. Así, su objetivo es aliviar el dolor, reducir la inflamación y acelerar el proceso de curación de las lesiones mediante productos bucodentales específicos.
Irritaciones por prótesis dentales u ortodoncia
La gingivoestomatitis también es frecuente en personas que llevan prótesis dentales u ortodoncia fija (brackets metálicos). Y es que, si la prótesis no está debidamente ajustada o si el aparato dental roza continuamente, es probable que terminemos teniendo heridas en la mucosa.
Reacción alérgica
La estomatitis alérgica se produce como reacción al contacto de un alérgeno con la piel o las mucosas de la boca. Aunque los alérgenos son diferentes en función de cada persona, algunos de los que provocan mayor cantidad de alergias son: mercurio, oro, níquel, flúor, menta… Muchas de estas sustancias se encuentran en multitud de alimentos y bebidas, o incluso pueden estar presentes en productos específicos para la boca.
Por ejemplo, en pastas de dientes, seda dental, enjuagues bucales o empastes dentales. Es por ello que, si tenemos alguna alergia, nos informemos debidamente de la composición de los productos antes de usarlos o consumirlos.
Dado que el origen de la estomatitis es muy variada, conviene no dejar de acudir a las citas planificadas, ya sea con el dentista u otro profesional.
Radioterapia y quimioterapia
La estomatitis también puede estar causada por las terapias de radioterapia y quimioterapia, propias de los tratamientos contra el cáncer.
¿Cómo se trata la estomatitis?
Como hemos explicado, la estomatitis tiene su origen en causas muy diversas y variadas, por lo que resulta esencial identificar qué la ha provocado. Solo así, el profesional podrá pautar un tratamiento adecuado para cada caso. Con el fin de abordar cuanto antes esta molesta enfermedad, es aconsejable acudir a un dentista o médico cuando se adviertan los primeros síntomas o algún signo extraño en la boca.
El tratamiento pautado podrá ser sintomático, es decir, enfocado a aliviar los síntomas, o podrá estar encaminado a combatir la causa que provocó la estomatitis.
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