¿Qué es el prognatismo mandibular y cómo se corrige?
El prognatismo es una anomalía ósea que supone un crecimiento de la mandíbula respecto al maxilar superior. Conoce sus causas, consecuencias y tratamiento.
Tu sonrisa es una gran carta de presentación: tener unos dientes alineados y blancos nos aporta un aspecto más saludable e influye de manera muy positiva en nuestra autoestima. Pero, ¿sabes que tu manera de morder puede afectar notablemente a tu imagen?
Los problemas de oclusión suponen, en muchos casos, una falta de armonía facial. A pesar de ser menos frecuentes que otras maloclusiones como, por ejemplo, la retrognatia, el prognatismo es una de las que más influencia tienen en la apariencia física de las personas que la padecen.
En el presente artículo te contaremos qué causas pueden motivar este problema de mordida y cómo podemos corregirlo.
Índice de contenidos
¿Qué es el prognatismo?
También conocido como clase III esquelética, el prognatismo es un problema de oclusión que afecta a un porcentaje de la población comprendido entre el 1 y el 3%.
Se trata de una anomalía del desarrollo de los huesos faciales que supone un crecimiento acentuado de la mandíbula respecto al maxilar superior. De esta manera, la mandíbula adquiere una posición adelantada y se produce, por tanto, un problema de oclusión que afecta cuantiosamente a la estructura facial.
Las personas que padecen prognatismo suelen acusar un mentón muy acusado. Pero, más allá de las consecuencias estéticas, esta maloclusión tiene numerosos perjuicios a nivel funcional y puede influir negativamente en el estado de salud general.
Consecuencias del prognatismo
La consecuencia más visible de la clase III esquelética es su repercusión en la imagen de la persona que la padece, convirtiéndose en muchos casos en su seña de identidad. Esto influye directamente en su autoestima, especialmente en caso de los pacientes que se encuentran en plena adolescencia.
Pero, además, este problema de oclusión tiene numerosas consecuencias en el estado de tus dientes y encías y, también, en tu estado de salud general.
Entre ellas, podemos destacar:
- Dolores de cabeza
- Molestias en la masticación
- Sobrecargas en la articulación temporomandibular y dolores de mandíbula
- Problemas de dicción -el ceceo es típico en personas que presentan clase III-
- Contactos no deseados entre las piezas dentales, que pueden provocar el desgaste de las mismas y suponen, a su vez, un mayor riesgo de padecer caries dentales
Pero, ¿a qué factores podemos ligar el origen de esta maloclusión?
Causas de la clase III
A este respecto, podemos hablar de 4 factores diferenciados que se encuentran asociados al origen del prognatismo:
- Factor genético: existencia de antecedentes familiares que padezcan este problema de oclusión
- Una caída temprana de los molares temporales
- Síndromes asociados a una anomalía en la hipófisis, relacionados a una producción excesiva de la hormona del crecimiento -gigantismo, síndrome de Crouzon-.
- Respiración bucal o colocaciones indebidas de la lengua dentro de la arcada
En caso de ser muy severo, el prognatismo es una maloclusión cuya detección resulta sencilla incluso a simple vista. Ante la presencia de estos signos, lo ideal es que acudas a un odontólogo especialista para que sea éste quien estudie tu caso de manera debida.
Diagnóstico del prognatismo
A la hora de acudir a la consulta del especialista, éste realizará una serie de pruebas diagnósticas: fotografías y radiografías. El odontólogo valorará los patrones de crecimiento de los huesos faciales del paciente y, en función del caso y de la edad del paciente, actuará de una manera u otra.
El procedimiento a la hora de abordar un caso de prognatismo difiere cuantiosamente en función de si el paciente es adulto o se encuentra en edad de desarrollo. Por ello, los especialistas inciden en la importancia de un diagnóstico temprano.
Pero, ¿cuál es el tratamiento idóneo para el prognatismo?
El diagnóstico temprano del prognatismo influye de manera muy positiva en el tratamiento
¿Cómo se corrige el prognatismo?
El procedimiento necesario para tratar la clase III esquelética depende, fundamentalmente, de la edad del paciente. Y es que el tratamiento es notablemente menos invasivo en caso de diagnosticar este problema de oclusión a una edad temprana.
Por este motivo, los especialistas inciden en la importancia de realizar una primera visita al odontopediatra a la edad aproximada de 6 años.
En esta cita, el especialista podrá detectar cualquier anomalía en el desarrollo de los huesos faciales -entre ellas, el prognatismo-. Para corregir estas maloclusiones en niños, el especialista optará por un tratamiento de ortodoncia interceptiva.
Estos procedimientos están encaminados a actuar sobre el crecimiento de las bases óseas, corrigiendo malposiciones en edades muy tempranas. Su pauta es adecuada para niños que presentan dentición mixta -es decir, que están realizando el recambio dentario y, en boca, tienen tanto piezas definitivas como temporales-.
Los procedimientos de interceptiva se basan en el uso de unos aparatos -generalmente removibles- que el niño deberá usar mayoritariamente en casa. Para corregir el prognatismo, los más indicados son:
- La mentonera, cuyo objetivo es frenar el crecimiento exacerbado de la mandíbula
- La máscara facial que, por el contrario, estimula el desarrollo del hueso maxilar. Generalmente, en este caso se pauta también el uso de un disyuntor de paladar que permita corregir la mordida cruzada.
En muchas ocasiones, tras terminar el tratamiento de interceptiva, será necesario colocar un aparato de ortodoncia correctiva -generalmente brackets metálicos o zafiro, en el caso de los adolescentes más exigentes con su imagen-. De esta manera, el especialista corregirá las malposiciones dentarias una vez los huesos tienen la posición adecuada.
Sin embargo, la situación es diferente si el prognatismo se diagnostica en la edad adulta. En estos casos, la única opción será optar por un tratamiento combinado de ortodoncia y cirugía ortognática. Éste se compone de tres fases diferenciadas:
- Un primer tratamiento de ortodoncia de una duración aproximada de un año con el objetivo de colocar las piezas dentales en la posición correcta con respecto a las bases óseas.
- La intervención a nivel hospitalario
- Un segundo procedimiento ortodóntico para corregir posibles desviaciones en las posiciones dentarias tras la operación.
La operación llevada a cabo para corregir el prognatismo se conoce como osteotomía mandibular. Se lleva a cabo a nivel hospitalario bajo los efectos de una anestesia general.
Su duración aproximada es de dos horas, si bien éste es un tiempo estimativo que puede variar en función de la complejidad del caso.
Si bien estos procedimientos combinados de ortodoncia y cirugía ortognática son tratamientos complejos e invasivos, los beneficios tanto a nivel estético como funcional son muy notorios.
Si quieres conocer de primera mano la experiencia de uno de nuestros pacientes que nos eligió para abordar su tratamiento combinado de ortodoncia y cirugía ortognática, te invitamos a escuchar el testimonio de Sergio.
Esperamos haber resuelto todas tus dudas acerca de cómo afecta el prognatismo a tu salud bucodental y cuál es el tratamiento más adecuado para abordarlo. En caso de que haya alguna pregunta que se te haya quedado en el tintero o, por el contrario, quieres pedir una primera cita con nuestro equipo médico, te invitamos a ponerte en contacto con nosotros.
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