Cuándo utilizar enjuagues bucales con clorhexidina
La clorhexidina es una sustancia antiséptica muy utilizada por los pacientes que se realizan determinados tratamientos dentales.
¿Alguna vez has oído hablar de la clorhexidina en la consulta de tu dentista? ¿Te la ha recetado tu odontólogo pero desconoces qué es exactamente?
Si es así, en este artículo vamos a despejar todas las dudas que puedas tener sobre este componente.
Índice de contenidos
¿Qué es la clorhexidina?
La clorhexidina es una sustancia antiséptica de acción bactericida y fungicida muy utilizada en diferentes especialidades de la Odontología.
Aunque se encuentra presente en diversos productos, como la pasta de dientes o en geles, lo más habitual es encontrarla en enjuagues bucales.
La Organización Mundial de la Salud incluye la clorhexidina dentro de su listado de Medicamentos Esenciales, un documento que aúna los fármacos y componentes más relevantes que debe recoger un sistema sanitario.
El objetivo de este componente es eliminar e inhibir el crecimiento de las bacterias presentes en nuestra cavidad oral.
En otras palabras, podríamos decir que la clorhexidina funciona igual que cualquier otro desinfectante que conozcamos.
Por tanto, reduce el riesgo de infección de una herida sin dañar la superficie sobre la que se aplica –encía y dientes, en este caso-.
Entre sus múltiples aplicaciones, sirve para tratar enfermedades periodontales (gingivitis y periodontitis), prevenir las posibles infecciones derivadas de una cirugía bucal o curar pequeñas lesiones en los tejidos blandos de la boca.
Casos en los que está indicado su uso
Será el profesional odontólogo quien recete la clorhexidina al paciente en distintos casos.
Lo más habitual es que sea prescrita por este profesional para complementar o aumentar la tasa de éxito de tratamientos llevados a cabo en las especialidades de Periodoncia e Implantología.
En caso de que solamente quieras disfrutar de un aliento fresco, lo indicado es un colutorio sin clorhexidina.
Enfermedades periodontales
La clorhexidina actúa como sustancia coadyuvante en aquellos tratamientos que combaten la gingivitis y periodontitis.
Además, contribuyen al correcto mantenimiento de las encías para evitar la recidiva de las patologías periodontales.
La clorhexidina es una sustancia antiséptica que se presenta normalmente en enjuagues bucales
Cirugía periodontal, implantes o extracciones
En caso de que el paciente vaya a someterse a una intervención quirúrgica que conlleve un alto riesgo de infección, el dentista recetará colutorios con clorhexidina.
Este tipo de operaciones pueden ser la cirugía periodontal, colocación de implantes o extracciones de piezas dentales.
Lesiones leves en la mucosa bucal
Aunque, de forma general, las llagas o aftas se curen sin necesidad de aplicar ningún tratamiento, no está de más realizar un enjuague de clorhexidina para agilizar la curación de estas heridas.
Además, previene que la placa bacteriana se acumule en zonas dañadas del tejido blanco.
Así se aplica la clorhexidina
La clorhexidina es un antiséptico bucal que se aplica de manera localizada, en este caso, en el interior de la boca.
Además, dado que dicha aplicación debe estar pautada y controlada, es imprescindible que el tratamiento sea prescrito por un profesional odontólogo.
Las instrucciones pautadas por el dentista variarán según cada caso, aunque normalmente el tratamiento con este tipo de sustancia suele durar un máximo de 15 días.
Su uso es muy sencillo, simplemente basta con aplicar la cantidad indicada por el experto.
Hay que tener en cuenta que los enjuagues bucales con clorhexidina no deben ser rebajados con agua, pues estos líquidos están preparados con la proporción adecuada.
Por lo general, el paciente debe enjuagarse la boca con el colutorio dos veces al día, durante un tiempo que varía desde los 30 segundos hasta un minuto.
Su efecto permanece durante alrededor de 12 horas.
De todas formas, las mencionadas son consideraciones generales.
Las indicaciones más adecuadas para tu caso te las proporcionará tu odontólogo para tu caso específico.
Precauciones a la hora de usar la clorhexidina
Aunque hayamos destacado los beneficios de la clorhexidina y parezca una sustancia antiséptica inofensiva, un aplicación inadecuada puede conllevar consecuencias negativas para nuestra salud bucodental.
A primera vista, este compuesto no tiene contraindicaciones, pero su uso excesivo puede ocasionar efectos adversos en la cavidad oral de la persona.
Aunque puedas adquirir fácilmente la clorhexidina, es recomendable que únicamente lo uses si te lo ha recetado un odontólogo.
Entre otros, los pacientes que usan demasiada clorhexidina llegan a experimentar una pigmentación y oscurecimiento en sus dientes y encías.
Además, es posible que sufra también alteraciones en el sentido del gusto.
Sin embargo, el aspecto positivo de estos efectos secundarios es que son reversibles y cesan al dejar de utilizar la clorhexidina.
En el caso que ejemplificábamos previamente, la pigmentación puede desaparecer mediante una profilaxis dental profesional.
Dónde comprar productos con clorhexidina
Los productos utilizados en tratamientos de odontología con clorhexidina pueden adquirirse en cualquier farmacia.
Por tanto, no será complicado encontrar un enjuague bucal con estas características si tu dentista te ha recetado esta sustancia.
En el mercado existe una amplia variedad de marcas comerciales que cuentan con productos específicos con clorhexidina
Como hemos dicho, es habitual que la clorhexidina se administre como un enjuague bucal, aunque también puede presentarse en gel, spray o pasta dental.
Entonces, ¿no basta con utilizar el cepillo de dientes?
Para conseguir una profunda y exhaustiva limpieza bucodental en casa es recomendable combinar el uso del cepillo con hilo dental y enjuagues bucales.
Aunque los colutorios con clorhexidina deban estar recetados por un dentista, existen muchos otros que pueden utilizarse de forma diaria tras el cepillado.
Esta acción ayudará a eliminar los restos de comida por completo y a mantener unos dientes y encías sanos.
Además de los cuidados rutinarios que siga el paciente en casa, es necesario que acuda al menos una vez al año al dentista para que los profesionales valoren el estado de su boca.
Solo así podrán detectar a tiempo cualquier problema o patología presente en la cavidad oral y ponerle remedio cuanto antes.
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